La muerte, en forma de peregrina, viene a visitar a una honrada familia campesina asturiana justo cuatro años después de que desapareciese la mujer del hijo mayor. Solo el abuelo la reconoce. Pero los niños de la casa consiguen, sin pretenderlo, que la muerte se duerma y se le pase la hora en que debía llevarse al hijo mayor quien, por su parte, a la vez ha salvado del suicidio a una chica desconocida, que pronto se instalará en la casa y, naturalmente, se enamorará de su salvador. La muerte volverá a la casa en la noche de San Juan, pero no tiene claro a quién ha de llevarse.

Me ha gustado mucho. Hoy Casona es un autor casi maldito. Hoy se lleva un teatro más social o políticamente comprometido, o más experimental. Pero Casona, aquí, se limita a contar una bonita historia, como una leyenda (los elementos folklóricos son contantes durante toda la obra: juegos, canciones, refranes, costumbres...). Lo hace utilizando una poética y un ritmo teatral previsible, tranquilo, de otra época, sí, pero que a mí me ha llegado. No necesariamente lo negativo es interesante. Aquí el mensaje es optimista y se busca simplemente hacer pasar un rato agradable al espectador y al lector. A fe que lo consigue, y eso es algo que quizá no puedan decir todos los famosos autores del momento. ( )

H1.31.3

Trata de una mujer que era la muerte que fue a buscar a una chica de una familia para llevársela con ella, pero lo que lo impidió fue que esta se encariñó con la familia. ( )