The Idiot (original 1869; edition 2003)

Libro denso, no solo por ser literatura clásica rusa sino porque la traducción al castellano también es la clásica (lo he comprobado) y resulta inaccesible en algunos pasajes. Abundan los puntos suspensivos en oraciones (¡y en medio de palabras!) en los que carecen de sentido, algunos mensajes no están adaptados para comprenderse sino que prima la literalidad, y varias expresiones son directamente erróneas en el español moderno y enrojecerían a la RAE y a la Fundéu. Traducir no es solo poner en un idioma lo que pone en el otro, también hay que hacerlo comprensible. Todo esto por no hablar de que es la obra agradecería una edición comentada, pero esa es otra cuestión.

Por lo demás, un valioso hueso duro de roer, con los grandes temas de ayer, hoy y siempre embebidos en una narración de pasiones, traiciones y grandes ardores espirituales que me llevan a pensar cómo la civilización pudo sobrevivir sin estar en el actual estado de continua distracción. Los zarismos, el socialismo y la democracia; el cristianismo ortodoxo, el catolicismo y el ateísmo; la pena de muerte, los muertos de pena y los muertos de hambre: todas son cuestiones que se tocan en las conversaciones del príncipe Mishkin con las personas que conoce en San Petersburgo tras pasar una larga temporada en Suiza curándose la epilepsia y otras afecciones físicas y espirituales. Lo realmente grave (y es una cuestión con la que empatizo) es que todos estos temas elevados quedan ocultos y semienterrados en las miserias humanas del día a día de la época, donde la mayoría de la sociedad sobrevivía como podía y lo más importante para una mujer era casarse y ver casarse a todas sus hijas. Si el mundo ha cambiado o no es algo que dejo a ojos del público.

Una importante crítica a la sociedad rusa y europea del XIX que nadie debería dejar de leer, especialmente si le interesa la literatura de aquella latitud, aunque recomendaría investigar ediciones y traducciones. Quizá esta sea la mejor, pero en ese caso necesita un pulido. ( )

Dostoyevsky set out to portray a "positively beautiful man" in The Idiot. Unfortunately in our society, such a character can only end up one way. ( )

It's a classic, but not nearly as good as Karamazov.

I had a hard time getting into this novel, which seemed to be as much of a love story as about the Big Philosophical topics I associate with Russian novelists. ( )

I re-read this because I remember really enjoying it as a teen and thinking it was quite funny at points. I sure didn't find that this time and I was frustrated by the pacing. I found the last half interminable and felt like I was missing something. I tried to read it with great attention to make sure I didn't miss some detail but still found little of importance. The contradictions and inconsistencies of the characters were confusing. It seemed not that the characters themselves were variable but that Dostoevsky had an inconsistent idea of what the character's roles. ( )

Here's what I wrote after reading in 1988: "Dostoevsky confuses me, yet I keep reading. 'The Idiot is a quintessentially Russian novel, one that penetrates the complex pysche of the Russian people.' Dostoevsky's hero, Prince Myshkin, is similar to Dostoevsky in that he is an epileptic. This, and his simplicitic idealism acquired within his sheltered invalid's environment, earn him the appellation "Idiot". His ideals and health, however, are tested when Myshkin re-enter wealth / power-oriented Society. The events that occur, including murder and mental illness, cause Myshkin to lose his fragile mental and physical health." Should definitely re-read this; would get even more from it at this more-experienced-at-life vantage point and it's deeply phychological (you probably read more for the story the first time). ( )